—¡Carla!
—dije.
—¿Eh?
—dijo Liam.
—¿Estás
viendo lo mismo que yo? —pregunté a Radi con cara de asco.
—Tía,
sí. Esto no puede ser, ¿qué hace ella aquí?
Los
chicos no entendían. Lo que pasaba era que Carla era una chica del
instituto, la típica pijita a la que le gusta One Direction sólo
por moda, una directionator. ¿Qué había ido a hacer a Barcelona?
¿No habrá ido al concierto?... Suerte que no nos quitó las
entradas.
Cuando
Carla nos vio a Radi y a mí con los chicos, no podía creer lo que
veían sus ojos.
—¿RADINA?
¿CATA? —dijo quitándose las gafas de sol y con los ojos como
platos.
—¿Sí?
—dijimos las dos con tono de interesantes.
—Eh,
no, em... Esto... —estaba completamente en blanco al ver a los
chicos. Se notaba que le faltaba esa seguridad que tiene en el insti
al estar rodeada de su pandilla de descerebradas.
—¿Quién
eres tú? —preguntó Zayn.
—¿Que
quién soy yo? Eh... ¿Quién soy yo...? Yo...
—Es
Carla —aclaró Radina de mala gana—, es compañera nuestra del
instituto.
—¿Qué
haces tú aquí? —pregunté entre dientes.
—¿No
es obvio? He venido para... El... Concierto de One Direction... Oye,
¿en serio estos son los reales? ¿No son impostores? ¿Harry? HARRY
TE AMO.
—...Ponte
a la cola —Harry le contestó en un tono impertinente burlándose
del tono creído de Carla.
Carla
puso cara de sorpresa.
—Vaya.
Qué creído te lo tienes, ¿no?
—Se
lo tiene creído porque quiere —le protegió Louis.
—Ah.
¿Y tú quién eres? ¿En la banda no estaban solo Liam, Harry y
Zayn?
NO
PODÍA CREERLO. ¿¿¿¿¿CARLA????? Sabía que era directionator
pero no tanto. ¿¡CÓMO PUDO DECIR ESO DELANTE DE LOS CHICOS?! La
mataba. LA MATABA.
—GET.
OUT. OF. MY. KITCHEN. —dijo Harry muy enfadado por sus amigos Louis
y Niall. Les habían excluido y odiaba que hicieran eso.
—Enhorabuena,
chavala, ahora 5 famosos te odian —añadió Zayn.
—¿¿Eh??
No, eh... ¡¡Lo siento!! Esperad... ¡Esperad, no os vayáis!
HARRYYYYYYYYY.
Todos
pasamos de ella y nos adentramos en la playa. Se lo tenía bien
merecido. Alguien como ella no merece conocer a los chicos ni por
asomo. Esta chica siempre se las arregla para joderme, aunque me vaya
a China, ahí estará ella, no sé cómo lo hace. Espero que los
chicos no piensen que somos como ella...
Dejé
de lado este tema e intenté disfrutar del día. Pusimos las bolsas
en un hueco de la arena y rápidamente nos quitamos todos la ropa
quedándonos en bañador (ya podéis imaginaros la corrida que
tuvimos Radi y yo al ver esos cuerpos serranos).
—¿Vamos
al agua ya? —preguntó Liam.
—Id
vosotros, yo me quedo un rato aquí... —contestó Radi.
—Sí,
yo también me quedo en tierra firme —añadió Niall.
—Yo
me quedo a broncearme —dijo Zayn.
—No
me extraña de ti... —dijo Harry— Bueno, entonces nosotros cuatro
vamos a nadar un rato.
Fuimos
hacia el agua, y mientras estábamos entrando, Liam comenzó a
hablar:
—Me
encanta estar en España. No sólo por las chicas como tú, Cata —me
morí cuando me dijo eso—, sino porque mira. Estamos aquí
tranquilamente en la playa sin paparazzis tocando las narices. El
clima de verano es perfecto. Tendremos que pasarnos muchas más veces
por aquí.
—¡Y
tanto que tenéis que hacerlo! Ya sabéis que las directioners
españolas siempre estamos esperándoos con los brazos abiertos.
—¡Ay!
Qué fría está el agua...
—Deja
de quejarte, Harold —le riñó Louis de broma—. Está mucho mejor
que en Inglaterra.
—Eso
es verdad...
Me
pareció una buena idea empapar al ricitos desprevenido. Me metí de
golpe al agua, cuando salí me dijo:
—Ala,
¡qué valiente!
—No
es para tanto... ¡Pero ahora verás! —contesté, y acto seguido me
abalancé sobre Harry, dándole un abrazo y mojándole entero.
—DIOS,
DIOS, DIOS, cómo has podido hacer esto... ¡Te vas a enterar!
Harry
y yo empezamos a tirarnos agua y a sumergirnos el uno al otro,
jugando, y nos alejamos de Liam y Louis.
—¿Qué
crees que ha pasado entre estos dos anoche? —preguntó Liam.
—No
lo sé... —contestó Louis— Espero que no sea nada serio, ya
sabes lo que dicen las directioners, “Larry es real”... Les
dolería mucho verle con alguien que no sea yo —el carrot-boy
bromeaba.
—Pues
yo me alegro por Harry, se le ve muy feliz con Catalina, y eso que
últimamente estaba un poco deprimido... Quizás por fin empieza a
enamorarse, aunque es difícil de él.
—Mi
Hazza, se hace mayor...
Radi
y Niall estaban sentados en la misma toalla, Zayn estaba un poco más
hacia allá, ya dormido, tomando sol en una tumbona.
Niall
estaba como triste, cabizbajo...
—Niall...
—empezó Radina— ¿Estás triste por lo que ha dicho antes Carla?
¿Porque no te consideraba miembro de One Direction?
—Pues...
Qué va, solo que...
—No
tienes por qué esconderte conmigo, sabes que puedes contarme lo que
sea.
—Buf,
para qué ocultarlo. Sí, estas cosas me afectan. Ya no tanto como
antes, pero... Duele mucho.
—Pero
rubio... Tú sabes que hay muchísimas chicas que mueren por
conocerte y estar contigo, entre ellas estoy yo, y por culpa de unas
cuantas idiotas no tienes por qué ponerte mal. En serio, yo te
quiero, la gente que no lo hace ellos se lo pierden.
—Aw,
Radi. Eres tan mona. Muchas gracias por todo... Pero creo que nunca
conseguiré que no me afecte.
—No
te preocupes, siempre estaré aquí, contigo, apoyándote aunque sea
desde la distancia.
Radi
le sonrió, Niall le devolvió la sonrisa. Se quedaron mirándose,
sin hablar.
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